Los modelos ingleses nunca dejan de sorprender.
De nuevo llegan al taller maquinas inglesas realizadas por antiguos aficionados que el propietario actual quiere ver en su colección con el noble color del latón visto. Los modelos vienen en diversos estados de conservación, decoración y motorización. Estas dos salieron de sus cajas con aspectos muy diferentes y mecánicas en bastante buen estado.
La que ha sido objeto de la primera intervención (Fairburn 2-6-4) estaba decorada en el color negro que se ve en la imagen y escudo de British Rail. El despintado reveló que antes llevó el color rojo inglés, probablemente en un intento de lucir con esa librea, la siglas del LMS. Una vez terminada, el color dorado del metal prepara la mente del coleccionista para cualquier decoración que quiera imaginar
.
.
Desprovista de su decoración última, el trabajo del artesano inglés se desveló como robusto y bien proporcionado pero con pocos detalles y partes muy simplificadas. A la tarea de una limpieza intensa y reparadora se ha sumado la instalación de escaleras, pasamanos, puertas nuevas de cabina, carbonera... así como la restauración de los cilindros y puesta a punto del rodaje y motorización. Una vez limpia y ajustada se comporta tan bien como un antiguo modelo oriental.
 |
| Un modelo con la discreta elegancia del tren inglés. |
La locomotora que ha ocupado el segundo lugar en la recuperación fue construida empleando una caja de montaje de la firma JAMIESON KIT. Esta empresa proporcionó a los aficionados ingleses una base excelente para tener en sus colecciones modelos de metal asequibles a las habilidades de un buen número de ellos.
 |
| Modelo a la llegada, sucio, funcionando y lleno de posibilidades. |
Tomando como escuela de aprendizaje estas cajas, muchos aficionados del siglo XX han acabado construyendo verdaderas piezas con calidad excepcional. Un buen método de partida con modelos asequibles para "desasnar" habilidades y comprobar las posibilidades reales de cada uno.
La locomotora que nos ocupa no está realizada en el latón al que estamos acostumbrados cuando abrimos nuestras cajas con la ilusión de las tareas nuevas por comenzar, sino que una buena parte de la carcasa es de alpaca. El modelo final luce dos colores de metales diferentes, que le confieren un aspecto distinto pero sobrio y elegante. Ha estado así desde el origen, el aficionado que la construyó dejó la máquina acabada y funcionando pero sin pintar ni barnizar.
En definitiva, dos modelos ¿cuál no?, que me han cautivado desde que llegaron y que recuerdan las enormes posibilidades que los aficionados de algunos países han tenido para desarrollar su afición y además, como en este caso, sus habilidades.
Las dos han salido del taller dispuestas para remolcar sus elegantes trenes
¿también de latón visto?